descripción del hotel
Ubicado en un palacio noble del siglo XVI restaurado con cariño, CoolRooms Palacio de Luces convierte cada estancia en un conmovedor retrato de Asturias. Las paredes de piedra dan acceso a habitaciones de madera pulida y tranquilas vistas a las montañas; las suites incluyen bañeras de hidromasaje y balcones con vistas al mar Cantábrico al amanecer. Sin embargo, la verdadera magia comienza más allá de la puerta. Los huéspedes pueden levantarse antes del amanecer para unirse a los pescadores locales en el mar y, después, aprender el bello arte de salar y degustar anchoas en una fábrica de conservas familiar cercana. Por la tarde podrá disfrutar de degustaciones cremosas en una quesería situada en lo alto de una colina o de un paseo guiado por las minas de azabache del Jurásico con la Asociación Azabache. Las tardes terminan en la terraza, donde los ventanales del piso al techo del restaurante enmarcan los barcos pesqueros de Lastres que regresan a casa.
Cada experiencia se encuentra a un clic de la página de inicio, lo que subraya la historia de una marca que considera el descubrimiento, no el alojamiento, como su esencia. Los itinerarios diseñados por conserjes, los guías privados y los entrenadores invitan a los huéspedes a diseñar sus días con la audacia o delicadeza que deseen. Un dato curioso: el palacio alguna vez albergó a la nobleza asturiana en el Camino Real; hoy en día, acoge a exploradores modernos que emprenden viajes igual de ricos. Con una combinación de tradición, colaboración con la comunidad y una personalización perfecta, CoolRooms Palacio de Luces se mantiene firme entre los hoteles más innovadores de España.